Lo pesado es raíz de lo ligero.
El reposo es amo de la intranquilidad.
Así también el llamado:
Camina todo el día sin separarse del pesado equipaje.
Aunque tenga delante de los ojos todos los lujos,
sigue contento en su soledad.
¡Pues el señor del reino, todavía menos a la ligera
tiene que tomarse con su persona lo que le rodea en la tierra!
Por tomar a la ligera se pierde la raíz.
Por la intranquilidad se pierde el reinado.
Es un capítulo a favor del poder y contra el sentido. Ensalza la sabiduría, la seriedad, el gobierno y la responsabilidad.
De rebote, la segunda frase puede sugerir algo atinado, con sólo entender así: "El silencio es el señor de la intranquilidad". Como si dijera: El silencio es lo que trae y gobierna la intranquilidad. Callar trae la intranquilidad.